La iglesia de Sant Esteve está situada en pleno centro histórico de la capital, junto al ayuntamiento (Comú) y en primera línea de la calle comercial en su tramo más alto, frente a la plaza Príncep Benlloch.
A quienes estén alojados en Andorra la Vella o quienes estén en esta zona para un día de compras, les recomendamos hacerse un «break» de una o dos horas y dedicarlas a recorrer las calles del pequeño núcleo del centro histórico de la capital: se trata de un recorrido plano (sin apenas desnivel), y de corto recorrido (no se camina más de 1 km en total) por hermosas callejuelas peatonales que conservan todo el encanto de la vida en en otros siglos en Andorra, y en el que además podremos visitar varios lugares de interés cultural y arquitectónico así como parar a comer en diferentes restaurantes con mucho encanto.
En este recorrido encontraremos también la Iglesia de Sant Esteve, que es de origen románico (siglo XII) y que ha tenido importantes modificaciones durante el siglo XX. Del período románico se conserva el ábside semicircular, donde se representaban las pinturas murales románicas que actualmente se encuentran repartidas en el Museo Nacional de Arte de Cataluña y dos colecciones privadas. Las bodas del Caná, la imagen de un toro alado , y El Cristo delante de Pilatos son algunos de los fragmentos del conjunto pictórico conservado en el Museo Nacional de Arte de Cataluña.
En el interior del templo se conserva una vida de madera policromada del mismo período y dos retablos de época barroca. También destaca el Cuadro de las Almas del siglo XVIII. Desde el exterior se observa el ábside semicircular románico que conserva la decoración lombarda de origen. La restauración del templo la dirigió en 1940 el arquitecto modernista Josep Puig i Cadafalch, que remodeló el campanario y la entrada lateral actual.
Entrada gratuita al templo 😉
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