La Casa de la Vall es uno de los edificios históricos más importantes del Principat d’Andorra que se convierte en espacio de encuentro y de conmemoración cada 14 de marzo para celebrar la Constitución.
Se trata de la antigua sede del Consell General d’Andorra. Ha sido la sede parlamentaria del Consell General d’Andorra hasta 2011, año en el que el consejo trasladó su actividad parlamentaria a un nuevo edificio.
El edificio original de la Casa la Vall está situado junto al casco antiguo de Andorra la Vella. Se trata de un edificio señorial de finales del siglo XVI. Desde el 1702 se convirtió en la sede de uno de los parlamentos más antiguos y con más continuidad de Europa, el Consell General, creado en 1419.
El edificio está abierto al público con un servicio de visitas guiadas en el interior en varios idiomas. Su visita es más que recomendable ya sea para ir ex profeso como para hacer una parada de quienes están por la zona haciendo compras desviándose a penas unos 100 metros del eje comercial.
ORIGEN
Enclavada sobre una roca con vistas al valle del río Valira en el casco antiguo de Andorra la Vella, la distinguida mansión señorial de piedra fue erigida en 1580 siguiendo las técnicas constructivas de las grandes masías catalanas de finales del siglo XVI.
Perteneció, en sus orígenes, a la familia Busquets hasta que en 1702 fue adquirida por el Consell General de las Valls d’Andorra (el más antiguo de Europa ya que data de 1419); a partir de esta fecha pasaron a celebrarse en la Casa la Vall las reuniones de los representantes de las siete parroquias del Principado y ha servir también como sede judicial.
En el año 1962 se llevó a cabo una significativa reforma que mejoró la unidad de la edificación y le brindó además una mejor sala de sesiones. Fue utilizada como sede principal del Parlamento andorrano hasta 2011.
ARQUITECTURA
Construcción de piedra de planta rectangular con 2 plantas. En la entrada, sobre la puerta principal mantiene aún las dovelas de granito. Aquí encontramos el escudo tradicional de Andorra colocado en 1702 y que reza el lema Virtus, Unita, Fortior, (la virtud unida es más fuerte). Este escudo se colocó sustituyendo al original de la familia propietaria de la casa, de la que solo queda sobre la puerta y grabada en piedra la fecha del año de construcción.
Elementos de defensa del edificio: tanto las dos troneras con apertura en aspillera que encontramos en la fachada que da a la plaza principal como la torre de la parte posterior, y que antaño dominaba las vistas sobre el que fué el Caminio Real, son elementos de defensa del edificio. De las dos troneras una es original (la de la derecha mirando la fachada) y la otra se restauró en el año 1962.
EL INTERIOR
Al ingresar en la planta baja se destaca su piso por demás original, así como su espectacular Tribunal Penal con mobiliario y decoración de madera.
Al subir a la primera planta, la llamada «Sala de los Pasos Perdidos» nos sorprende con los murales originales de finales del siglo XVI, representando el período de la Pasión de Cristo. Sobre el lado norte se ubica la cocina de coloridos azulejos con su particular y auténtica chimenea, que nos permite imaginar cómo era la organización de la actividad política de la época.
En el punto neurálgico, se encuentra la sala de sesiones, así como la simbólica campana que se empleaba para llamar a Pleno y el singular y misterioso armario de las Set Claus (siete Llaves) donde se guardaban importantes documentos de la historia del Principat d’Andorra, y solo podía abrirse si estaba presente un representante portador de llaves de cada una de las siete parroquias. En esta misma planta se halla el despacho oficial del presidente, donde se reciben a las visitas protocolares.
El segundo piso, en la actualidad espacio multiuso de conferencias y sala de reuniones, cumplió las funciones de buhardilla, dormitorio para los parlamentarios y sede del primer museo postal sucesivamente
LOS JARDINES
En el frente, los laterales y la parte posterior del edificio hay esculturas contemporáneas que invocan momentos significativos que muestran algunos de los episodios más sobresalientes de la Historia d’Andorra, como la firma del Pareatge o el referéndum para la Constitució de 1993. Destacan:
- Monumento al 7 º Centenario de los Pareatges (Luigi Terruggi 1978)
- Monumento al 1er Centenario de la Nueva Reforma (Josep Viladomat, 1967)
- Monumento a los Hombres y Mujeres de Andorra que quisieron la Constitución (Emili Armengol, 1993)
VISITAS
La Casa de la Vall bien merece una visita para conocer la particular historia y el sólido sistema institucional del Principat d’Andorra.
Así que, si queréis vivir Andorra de otra manera aquí os dejamos una parte importante de su historia para conocerla mejor.
Para visitarla tendrás que adquirir una entrada por 5 € en la misma recepción del edificio. La visita se puede hacer de forma libre con un audioguías; no obstante, si lo prefieres, también puedes pedir la visita guiada (con un suplemento de 1,5 €).
Importante: Dada la antigüedad del edificio, su estructura no está acondicionada para personas con movilidad reducida.